Le nouveau Nuevo León, ces’t moi

Similitudes entre Samuel García y Luis XIV de Francia.

Ha pasado un año y un mes desde que Samuel Alejandro García Sepúlveda se convirtió en gobernador constitucional del estado de Nuevo León. 

Y aunque no tiene 16 años como los tenía Luis XIV de Francia cuando en 1655 ante el parlamento vociferó “El estado soy yo” para recordarles a los presentes que la suprema autoridad era él; sí existen desplantes similares entre el históricamente conocido Rey Sol y el ahora famoso Mirrey Naranja. 

Puede que la frase no sea del todo real pero sí pinta el estilo de...

...dos gobernantes arrebatadizos y absolutistas.

Luis XIV decretó diecisiete edictos con interés específico de aumentar la recaudación fiscal y lo logró. 

Samuel también ha respaldado las estrategias para ingresar más tributos de la ciudadanía a las arcas estatales. 

La más polémica sin duda ha sido el replaqueo pues lo anunció desde el inicio de su gobierno como una medida instrumentada por el gobierno federal y declaró:

Estoy sorprendido cómo se manejó este tema…una autoridad federal nos avisó que en diciembre iba a salir una norma oficial mexicana, es competencia Federal, se nos avisó y cómo dijo Aldo (Fasci): hicieron tormenta y todavía ni chispea, increíbe, ya estaban hablando de cuánto iba a recaudar y yo ni vela en el entierro tengo en ese tema, vayan y pregunten a la autoridad Federal.                 

Y pues sabemos que sí le compete a las autoridades estatales, sobre todo porque vendieron la idea de manera conjunta Tamaulipas, Nuevo León y Coahuila de que esta medida abonaría a la seguridad regional vía un mejor control de las placas para los automóviles en la zona.

Y no está mal que se recauden impuestos siempre y cuando estos se aprovechen para total beneficio de los ciudadanos y la infraestructura pública óptima que merecen.  Lo indebido es manejar un doble discurso a modo para quererle jugar el dedo en la boca a los contribuyentes.  

Es importante para Nuevo León que su gobernador madure como político funcional y deje de ser un grillo de ocasión.  

Que se faje los pantalones y que su sí sea sí y su no sea no.

Aún recuerdo a Samuel, el voluble legislador local.  Sobre todo con un tema que me impresionó muchísimo porque lo viví muy de cerca.  

Él era coordinador de la bancada de Movimiento Ciudadano en el Congreso Local de Nuevo León y apenas terminada una reunión con los coordinadores del resto de los grupos políticos, Samuel salió a declarar todo lo contrario a lo acordado internamente.  

Dentro, se discutió sobre la compra de equipo de cómputo que hacía mucho tiempo no renovaban para los diputados y asesores.  

Macs nuevas para todos.  

Argumentos vertidos por los involucrados y al final se justificó el gasto en el equipamiento.  Los diputados dijeron estar de acuerdo, entre ellos el mismo Samuel.  

Pero, a los pocos minutos ya en el lobby del Congreso y con la prensa reunida, García Sepúlveda conminaba a sus compañeros de legislatura a no realizar gastos frívolos en detrimento de la ciudadanía.  Todos nos quedamos perplejos por la perplejada del niño diputado.  

Y así se ha manejado una y otra vez, a conveniencia de sus deseos.

Lo urgente es que se tome unos pasos y a distancia enfoque la perspectiva de lo que representa ser gobernador en uno de los estados más poderosos, económicamente hablando, de México.  

Samuel García tiene la oportunidad de representar con dignidad ese golpe de timón que requiere la política de nuestro país.

Es joven pero eso no es impedimento para que si se lo propone, marque la diferencia en favor de influir favorablemente en las nuevas generaciones.  

Que deje de una vez por todas de buscar ganar el reino de las redes sociales y por añadidura podrá en realidad gobernar con responsabilidad.  

Sin duda poco coincido con las formas del gobernador y mucho pudiera ser por la brecha generacional que nos separa pero lo que sí nos debe unir a todos es la necesidad de preservar el liderazgo del estado en todos los ámbitos que históricamente le competían.  

Sobre todo en seguridad e infraestructura pública.

Samuel Alejandro debe permitirse ser asesorado.  

Rodearse de gente sabia y escucharlos; de nada sirve que le aplaudan y sigan la corriente, cortesanos indeseables e ignorantes.  

Y aunque siempre se escucha que en el reino de los ciegos el tuerto es rey, a Nuevo León lo que le sirve es un dirigente estatal con visión periférica 20/20 echado para adelante no por simulada autoestima sino por sapiencia que respalde sus intenciones de orden y progreso.  

Y los medios de comunicación tradicionales tampoco ayudan mucho a provocar un cambio en su actitud.  

Le aplauden siempre más que cuestionarle.  Recientemente durante una entrevista, García Sepúlveda, explicando montos de recaudación y ahorro, le pregunta a su esposa: “7 x 6” a lo que Mariana responde: “56”.  

Y él valida la cifra para hacer énfasis en que Nuevo León obtendrá 56 mil millones de pesos extras en sus finanzas.  

Y sí, gravísimo el error de ambos pero lo terrorífico fue que el entrevistador NO los corrigió.  

No sé si por miedo a que al hacerlo no le volviera a dar una entrevista o porque si evidenciaba el error del gobernatore Multimedios se pudiera enfrentar a perder millones de pesos por ingresos en cobertura a las acciones del dirigente estatal.  

Por el bien de todos en Nuevo León debemos aterrizar a Samuel.

Y claro, por inercia natural a lo que se muestra en el escenario nacional, en el nuevo Nuevo León también se vive diariamente una muy marcada polarización social.  Por un lado los FOSFO FOSFO y por el otro los anti Samuel.  

Y no es malo enfrentar nuestras posturas, lo que es indebido es que nos metamos tanto en el polémico ir y venir de infructuosas discusiones y dejemos que Samuel siga por la libre haciendo y deshaciendo sin que haya un freno ciudadano que lo regule.  

Por mucho es preferible que García Sepúlveda tome la gallardía de la investidura seria de un gobernador regio, a que dure cinco años más siendo una imitación agüitada de Lord Farquaad.  

Los neoloneses (con un solo neo) tendrán la última palabra.
Alejandro Pulido Gómez

Secretario de Prensa para Latinoamérica y el Caribe del IDC DOCKWORKERS (Consejo Internacional de Estibadores Portuarios) y Coordinador de Relaciones Internacionales para IDC MÉXICO. Director de Comunicaciones de World Sport Academy WOSPAC MEXICO. Politólogo EXATEC y consultor con experiencia en comunicación social.  Asesor legislativo local y federal. Zoon politikón.